En este artículo, descubrirás la verdad detrás de los datos sobre las 6 habilidades clave para manejar el estrés. Prepárate para explorar cómo estas habilidades pueden transformar tu vida y aprenderás a cultivarlas en ti mismo. ¡No te lo pierdas!
Los niveles elevados de estrés y ansiedad han sido características de los últimos tres años.
La friolera de 8 4% de los adultos estadounidenses informan sentir alguna emoción relacionada con el estrés prolongado. Ya se trate de los desafíos provocados por el COVID-19, la agitación política sin precedentes, los devastadores desastres naturales o una economía inestable, parece que los factores estresantes con los que vivimos a diario no tienen fin.
Si bien es normal experimentar cierto nivel de estrés en ocasiones, el estrés crónico puede causar estragos en nuestra salud mental, física y emocional. Desde un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y cáncer hasta depresión severa, el estrés tiene el poder de reducir tanto la calidad como la duración de nuestra vida. No es de extrañar entonces que los tratamientos para el manejo del estrés se hayan disparado en los últimos años e incluso hayan impulsó una industria multimillonaria.
A pesar de la prevalencia de los factores estresantes que nos rodean, algunas personas pueden manejar con éxito sus niveles de estrés e incluso prosperar en situaciones estresantes. Teníamos curiosidad por saber por qué algunas personas pueden lidiar con el estrés mejor que otras y en qué tácticas confiaron para mitigar los efectos del estrés.
Al analizar las evaluaciones de incorporación de la mentalidad, el comportamiento y los resultados de miles de miembros de BetterUp, identificamos los factores personales específicos asociados con la capacidad de nuestros miembros para manejar el estrés.
Lo que dicen los datos
Nuestros datos revelaron los seis factores importantes para el manejo del estrés.
Incluso cuando nada específico ha salido mal, a veces las personas se apegan a un estándar interno irrazonable o incluso imposible y se juzgan a sí mismos como incompetentes. Ya sea por nuestro propio desempeño, el tipo de padres que queremos ser, la forma en que queremos presentarnos o el tipo de vida que queremos vivir, algunas personas se sienten estresadas porque no han ajustado esas expectativas propias a alinearse con los desafíos de nuestro mundo actual.
El antídoto es la autocompasión. Cuando somos compasivos con nosotros mismos, nos tratamos de la misma manera que responderíamos a un amigo oa un ser querido. En lugar de castigarnos por un fracaso, lo vemos como una oportunidad de crecimiento y reflexión. Esto nos ayuda a encontrar aspectos positivos en cualquier resultado, lo que a su vez nos ayuda a fortalecer nuestra resiliencia frente a los contratiempos. El resultado final es un nivel de estrés más manejable.
La buena noticia es que controlar nuestras emociones es una habilidad que se puede aprender y fortalecer con el tiempo. Las personas que son buenas para controlar sus emociones tienden a tener una inteligencia emocional alta y son conscientes tanto de sus experiencias internas como de los sentimientos de los demás. Practican mindfulness y estrategias de afrontamiento que les permiten autorregular emociones difíciles. Modulación de respuesta puede ayudarnos a mantener la calma incluso en las situaciones más estresantes.
Fluir por otro lado, es satisfactorio y profundamente atractivo. Es el estado de estar completamente absorto mentalmente en una sola cosa, estar “en la zona”, para que todo se sienta fácil, natural y sin esfuerzo. El enfoque es un ingrediente clave para entrar en el estado de flujo.
En una era marcada por la incertidumbre, la agilidad cognitiva nos permite replantear situaciones estresantes en oportunidades de crecimiento y exploración. No nos sentimos víctimas del destino, sino empoderados para forjar nuevos caminos e inventar nuevas y mejores soluciones.
La conexión social nos ayuda a mitigar los efectos del estrés tanto a nivel físico como emocional. A nivel emocional, las palabras de apoyo y aliento de los demás pueden ayudarnos a replantear nuestra situación y cultivar una mentalidad más positiva. A nivel físico, un abrazo de un amigo o el toque de un ser querido libera oxitocinauna hormona que reduce los niveles de cortisol, la presión arterial y otros efectos del estrés.
por qué esto importa
A medida que el mundo se vuelve cada vez más incierto, la cantidad de factores estresantes con los que tendremos que vivir aumentará con el tiempo. Es fundamental que adoptemos y practiquemos técnicas eficaces de manejo del estrés lo antes posible. Al aprender a manejar nuestro estrés ahora, podemos prevenir problemas mentales, emocionales y físicos más serios en el futuro. A corto plazo, debido a que se siente menos estresado, no responderá de la manera que tiende a convertirse en una reacción en cadena que crea aún más estrés, para usted y las personas que lo rodean.
Nadie nace habiendo dominado las seis habilidades para reducir el estrés. Al igual que nuestros músculos, todos pueden fortalecerse con el tiempo con un esfuerzo constante. Llamamos a la práctica de aprender a controlar la forma en que pensamos, nos comportamos y sentimos aptitud mental.
Así como el entrenamiento físico puede ayudarnos a fortalecernos y prevenir lesiones, la aptitud mental mejora nuestro bienestar general y previene lesiones mentales y emocionales. Las personas mentalmente en forma pueden prosperar incluso en las situaciones más estresantes, porque pueden regular sus emociones y responder a las situaciones de manera reflexiva y deliberada. Esto aumenta en gran medida su capacidad para generar resultados positivos.
Manejar el estrés de manera efectiva requiere trabajo duro y constancia, pero vale la pena exprimir el jugo. En nuestro mundo estresado, la claridad y la calma que provienen del desarrollo de estas seis habilidades clave pueden ayudarnos a vivir vidas más largas, saludables y felices.
Descubra lo que revelan los datos sobre las 6 habilidades clave para manejar el estrés
El estrés es una parte inevitable de la vida cotidiana. Todos nos enfrentamos a situaciones estresantes en diferentes momentos y de diferentes magnitudes. Aprender a manejar adecuadamente el estrés es fundamental para nuestro bienestar emocional y físico. Existen varias habilidades clave que podemos desarrollar para hacer frente a las tensiones y demandas de la vida. Aquí está todo lo que necesitas saber sobre las 6 habilidades más importantes:
1. Identificar los desencadenantes del estrés
Para manejar el estrés de manera efectiva, es importante identificar los desencadenantes que lo provocan. Estos desencadenantes pueden variar para cada persona, y es fundamental reconocer cuáles son los tuyos. Pueden ser situaciones laborales, conflictos interpersonales o incluso pensamientos negativos. Una vez que identifiques los desencadenantes, podrás tomar medidas para enfrentarlos de manera más efectiva.
2. Cultivar la resiliencia emocional
La resiliencia emocional es la capacidad de adaptarse y recuperarse de situaciones estresantes. Es una habilidad clave para manejar el estrés a largo plazo. Para cultivar la resiliencia emocional, es importante aprender a aceptar los cambios y las adversidades de la vida. Además, debes construir una red de apoyo sólida, que incluya familiares, amigos y profesionales de la salud mental.
3. Practicar técnicas de relajación
La práctica regular de técnicas de relajación puede ayudarte a controlar el estrés de manera más efectiva. Algunas técnicas de relajación populares incluyen la meditación, la respiración profunda, el yoga y el ejercicio físico. Prueba diferentes métodos y encuentra el que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias.
4. Mejorar la gestión del tiempo
La gestión del tiempo juega un papel crucial en la reducción del estrés. Es importante establecer prioridades claras y organizar tu tiempo de manera eficiente. Aprender a delegar tareas y decir “no” cuando sea necesario también puede ayudarte a evitar la sobrecarga de trabajo y reducir el estrés asociado.
5. Practicar el autocuidado
El autocuidado es esencial para manejar el estrés de manera efectiva. Dedica tiempo para ti mismo y tus necesidades, ya sea a través de actividades placenteras, descanso adecuado, buena alimentación y ejercicio regular. El autocuidado te ayudará a recargar energías y enfrentar el estrés diario con mayor resiliencia.
6. Buscar apoyo profesional cuando sea necesario
Si el estrés se vuelve abrumador y dificulta significativamente tu funcionamiento diario, es importante buscar apoyo profesional. Los profesionales de la salud mental pueden brindarte herramientas y estrategias específicas para manejar el estrés en tu vida. No dudes en buscar ayuda si sientes que tus habilidades para manejar el estrés se ven superadas.
Aprender a manejar el estrés es un proceso continuo y personal. No existe una solución única para todos, pero con la práctica y la implementación de estas habilidades clave, puedes adquirir herramientas poderosas para manejar el estrés y mejorar tu calidad de vida.